En este 2018 nuestra escuela está embarcada en un proyecto
institucional que prioriza la comunicación, que pretende devolver al lenguaje
su capacidad de descubrir, ordenar, comprender, dar sentido a nuestras
experiencias y a las de los otros. Las palabras crecen con nosotros y es a
través de ellas que emerge el mundo real pero también lo deseado, lo soñado, lo
desconocido, los otros mundos posibles. Queremos recuperar la pasión y el juego
propios del lenguaje, su capacidad de articular nuestras ideas y nuestras
emociones para conocer, crear, gozar, recordar, soñar con los otros y
transformar nuestras vidas cotidianas.
Este proyecto se enmarca dentro de otro más amplio que entiende que el
arte es una excusa para mejorar nuestros vínculos, nuestra vida, nuestras ganas
de enseñar y aprender juntos. El arte, en cualquiera de sus manifestaciones nos
permite imaginar y crear nuevas realidades, nos empuja a existir más allá de lo
conocido, a entender que nuestra vida es una labor de creación y no un destino
en el que nada podemos cambiar. Por esto es que en nuestra escuela, con el
apoyo de las familias, brindamos a los niños la oportunidad de vivir la
experiencia de participar de talleres de artes visuales, teatro, música, danza
y expresión corporal, que habilitan a cada uno a comunicar su mundo interior,
afianzar el vínculo con los otros y crear un espacio común intersubjetivo.
5º A estuvo investigando sobre la telefonía y su evolución. Desde que
se creó el primer teléfono por el año 1808 hasta el día de hoy. Representarán su
presencia actual en la sociedad y en nuestra vida cotidiana.
5º B bailó un tango electrónico mostrando como la tecnología influye en los diferentes géneros musicales.
5º C presentó un baile creado a partir de diversas canciones con
las cuales nos mostrarán cómo la música genera diferentes emociones en las
personas, o cómo las personas eligen la música que escuchar según su estado
anímico.